Una estrategia de organización es esencial para la gestión
eficaz de cualquier emprendimiento. Un líder de debe ser capaz de ver el
panorama, anticipar las variables que podrían afectar a la línea de tiempo o de
producción y poner un plan en marcha para hacer frente a posibles problemas que
se lleguen a presentar. También debe gestionar los flujos de información que
alimentan al proyecto, tales como los recursos humanos, el inventario, la
investigación y el desarrollo, finanzas, entre otros.
La organización también entra en juego en a la hora de
administrar un presupuesto. Es importante mantener registros detallados y
precisos de todos los ingresos y gastos que se generan en el transcurso de un
período determinado de tiempo, normalmente varios meses o trimestres. Con esta
información, los directores de finanzas pueden averiguar dónde reducir los
gastos para aumentar los márgenes y la rentabilidad de la empresa. La gestión
presupuestaria no solo requiere la capacidad de llevar registros precisos, sino
también de crear un sistema que permita que la información sea fácilmente
accesible.
Las personas organizadas pueden manejar su tiempo con
eficacia. Saben cómo programar las distintas tareas tanto de preparación,
realización y seguimiento de los eventos y actividades que ocurrirán a lo largo
de su día. A diferencia de aquellos que siempre van tarde para los asuntos
importantes, las personas con organizadas saben cómo administrar su tiempo
adecuadamente, pensando y planificando el futuro. Saben que su tiempo es lo más
valioso y por ello se anticipan a planear los viajes y las citas importantes,
siempre llegando puntualmente. Este mismo principio aplica en el ámbito
laboral: tener control sobre la gestión del tiempo ayuda a los empleados a
completar los trabajos antes de la fecha límite y de manera profesional.

Comentarios
Publicar un comentario